Hoy, bajando hacia el metro para ir al Euskaltegi, me he dado cuenta de que hay gente para todo, pero a casi todos de esos les caracteriza una cosa: la prisa.
Ni las motos de carrera (en proporcion) van tan rapidos como algunos de los que me encuentro yo por las mañanas. Que digo yo... ¿no será mejor levantarse 5 minutillos antes y te ahorras el trance de sudar despues de haberte duchado? A mi me gusta ser puntual, y por eso me levanto con tiempo para hacer todo lo que tengo que hacer cada mañana (ducharme, desayunar, despertarme, ponerme las lentillas...), pero aun asi me sigue sobrando tiempo. Es más, empiezo el Euskaltegi a las 9.30, y a las 8.10 ya estoy levantado. Solo os dire que de mi casa al metro, 3 minutos, el viaje en metro, otros dos y medio, y del metro de Erandio al Euskaltegi, 4 minutos. ASi que mirad si tengo tiempo suficiente...
En fin, que luego los que notamos que hay prisa somos los que olemos bien, a jaboncito y a colonia, ya que si sudas... Que asquete... Pues eso, que hay que tomarse la vida con tranquilidad: a las mañanas, conduciendo, en las relaciones con las personas, en los quehaceres diarios... Total, si de morir ya hay tiempo de sobra, no hace falta hacer las cosas más rapido...
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